Reglas para una correcta gestión del stock. Cómo resolver problemas operativos de la empresa con el empleo de métodos científicos

04 febrero 2019

Podemos considerar los modelos de gestión de stock como reglas de comportamiento útiles para planificar las compras o la producción. Se trata de representaciones simplificadas de la realidad que muestran cómo resolver problemas operativos de la empresa. Son ejemplos útiles para abordar científicamente los problemas de una compañía, estudiar la realidad laboral y elaborar los modelos específicos a utilizar en la práctica.

Este artículo tiene el objetivo de recopilar información esencial sobre los modelos de gestión stock; la descripción del funcionamiento completo de cada modelo se analizará con detalle en un artículo aparte.

Índice del artículo:

1. Stock de producto: cuánto es necesario y cómo gestionarlo de manera eficiente

La gestión de existencias o stocks pertenece al ámbito del control del flujo de los materiales dentro de un proceso logístico/productivo y su objetivo es reducir al mínimo el coste de mantenimiento de los productos en almacén, garantizando una correcta alimentación de los flujos productivos y de venta.

Por stock se entiende cierta cantidad de un artículo acumulada para ser puesta a disposición de un usuario, con el fin de que la consuma según sus necesidades. Las existencias son un depósito de compensación que permite crear una conexión flexible entre fases consecutivas del proceso productivo, pero con diferente frecuencia operativa. Por ejemplo, el abastecimiento de materias primas es periódico, mientras que el uso en producción es continuo.
Los stocks garantizan la disponibilidad de los materiales para reducir el tiempo del ciclo pedido-entrega, la continuidad de funcionamiento del proceso aguas abajo/aguas arriba y la reducción del riesgo de rotura de stock (stock out). Con tal propósito se habla de cobertura de las existencias si los artículos están inmediatamente disponibles para la entrega al cliente.

Además de cubrir las funciones mencionadas, el almacenamiento de stock puede tener fines especulativos, como por ejemplo aprovechar oportunidades de inversión y controlar los precios de los productos.

Dentro de un sistema de distribución se pueden identificar varios macro-tipos de stock:

  • En tránsito (o viajantes): existencias contenidas en los medios de transporte
  • En los depósitos
  • De ciclo: stocks ligados a un ritmo operativo diferente entre dos fases consecutivas de la cadena logística. Permiten desacoplar los procesos
  • De seguridad: existencias necesarias para cubrir la variabilidad de la demanda o del lead time de reabastecimiento

La política de gestión de las existencias concierne al control del flujo de los materiales, pero ¿de qué materiales? Es oportuno hacer una distinción entre:

  • Demanda de stock independiente: las reservas en este caso se refieren a la demanda de materiales de los cuales la cantidad requerida no depende del consumo de otros sino del mercado (por ejemplo, la reserva de recambios);
  • Demanda de stock dependiente: la cantidad requerida depende del consumo aguas arriba del proceso logístico/productivo considerado. Obviamente, estos materiales pueden formar parte de la demanda independiente si los productos se venden directamente.
    Para profundizar este tema, lee nuestro artículo: Cómo gestionar las reservas de manera eficiente

Los modelos de gestión de las reservas son muchos; en este artículo no los analizaremos todos sino que nos detendremos sólo en aquellos que probablemente proporcionarán más respuestas a tus problemas.

 

2. Productos de demanda continua: modelos de gestión de stock

El caso más sencillo que un gestor de stocks podría tener que resolver es el de un pedido de reabastecimiento de mercancía de demanda regular. Estos productos, como se puede intuir, requieren pedidos periódicos durante todo el año, por lo que no son necesarios modelos particulares para su gestión.

Sin embargo, un problema posible será la manera de gestionar el almacenamiento de estos artículos para poder conocer en todo momento la cantidad y las existencias y mantener bajo control el estado del material. Para conseguir una solución de almacenamiento eficiente, lee nuestro artículo de profundización: Artículos de demanda continua: modelos de gestión de las reservas e instrumentos para almacenarlas

3. Cómo usar el modelo de Wilson para la gestión de stocks: el caso de la demanda conocida y constante

El modelo de Wilson se puede aplicar cuando se conoce tanto la cantidad a pedir como el intervalo de tiempo entre un pedido y el otro, porque son factores constantes. Según este modelo, los únicos costes relevantes a considerar a la hora de determinar la cantidad a pedir son los siguientes:

  • Coste de pedido (directamente proporcional al número de pedidos efectuados)
  • Coste de conservación (que aumenta en base al número de lotes de abastecimiento pero es inversamente proporcional al número de pedidos)

Para saber la cantidad, es necesario expresar una función objetivo y entender con qué valor del lote se reduce al mínimo la suma de los costes de pedido y de conservación.

Definida la cantidad, será posible definir de manera muy sencilla tanto el número de pedidos a realizar como el tiempo de reciclado.

Para profundizar este modelo: Modelo de Wilson para la gestión de las reservas: el caso de la demanda conocida y constante

4. Cómo elegir entre modelos de gestión por punto de pedido o intervalo fijo

Estos dos modelos de gestión de los stocks forman parte de los modelos de probabilidad tradicionales, cuyas características principales son las siguientes:

  • La demanda es independiente
  • Tratan problemas de mercancía continua
  • Los parámetros no varían con el tiempo
  • Al menos un parámetro es aleatorio

La hipótesis de base para ambos modelos es la siguiente: la demanda es una variable casual gaussiana y el lead time del proveedor es conocido y constante.

Por lo tanto, no es posible efectuar a priori pedidos de reabastecimiento en cantidades constantes y con intervalos constantes sino que hay que elegir entre:

  • Una gestión por punto de pedido, pidiendo cantidades constantes cada vez que las reservas disponibles alcanzan el punto de pedido
  • Una gestión por intervalo fijo, pidiendo cantidades variables con intervalos fijos preestablecidos

¿Cuál de los dos modelos es más adecuado? Lee el artículo para descubrir los tres elementos a considerar a la hora de elegir entre estos dos modelos: Modelos de gestión por punto de pedido y por intervalo fijo: diferencias y cómo elegir

5. El sistema MRP: ¿cómo calcular la demanda de materiales?

El Material Requirement Planning MRP es un modelo de planificación de la demanda de los materiales necesarios para la elaboración de productos acabados. Es útil para organizar los pedidos de producción y de compra, teniendo en cuenta la demanda del mercado, las especificaciones y los lead times de producción.

Este sistema es preferible a los sistemas por punto de pedido o por intervalo fijo porque comporta niveles de existencias más bajos y no necesita previsiones precisas.

Los límites del sistema MRP se vinculan sustancialmente a dificultades de recopilación y actualización continua de la información necesaria sobre los materiales en almacén. Para evitar este problema se pueden utilizar los almacenes automáticos verticales de bandejas dotados de WMS, que permiten el seguimiento de todos los materiales almacenados, poniendo a disposición prácticamente un inventario just in time.

Análisis sobre el sistema MRP y su integración con los almacenes automáticos verticales: El sistema MRP: ¿cómo calcular la demanda de materiales?

6. Just in Time: cómo producir sin derroches

Este sistema de gestión, así como el MRP, han sido ideados específicamente para la gestión de productos de demanda dependiente, como materias primas y partes componentes de una empresa manufacturera cuya demanda “depende” de la del producto acabado. El Just in Time es un método de gestión de la producción que permite limitar, y en algunos casos hasta anular el stock.

Sin embargo, pasar de la teoría del Just in Time a la práctica no es tan sencillo; hemos profundizado el tema en este artículo: El Just in Time: cómo producir sin derroches

7. Descubre cuál es la cantidad ideal de mercancía hay que conservar como stock

Independientemente del modelo utilizado, ésta es la pregunta que todos nos planteamos y a la que nadie sabe dar una respuesta concreta. A menudo se tiende a sobrestimar la cantidad de material pedido sin tener en cuenta los costes de gestión de los stocks y los objetivos específicos para los cuales es necesario conservar cierta cantidad de stocks.

Antes de enviar el pedido es necesario disponer de una serie de datos sobre las salidas, las entradas y los vínculos de gestión y organización de la empresa.

En este artículo ¿Cuál es la cantidad ideal de mercancía que hay que conservar como reserva? tratamos de dar una respuesta a esta pregunta.

Ideas para la reorganización del almacén

Mejorar la organización del almacén no tiene por qué ser una operación compleja: estudia las planimetrías, piensa tanto en horizontal como en vertical, entrevista a tu equipo. Descubre algunos consejos fáciles de aplicar para aumentar la satisfacción del personal y tus ingresos de forma inmediata.
ideas-spagnolo